Los ilustrados prohibieron con razón los disciplinantes, las bofetadas en las misas y los empalados. A los ilustrados les resultaba incomprensible y repugnante el salvajismo de los disciplinantes. Sostenían que se flagelaban en público con la doble finalidad de cumplir algún voto y de impresionar a algunas mujeres con una muestra de hombría feroz: «Contémplese … Continúa leyendo LLEGAR A DIOS POR EL DOLOR 1/2 Latigazos, empalados y bofetadas
LLEGAR A DIOS POR EL DOLOR 1/2 Latigazos, empalados y bofetadas